domingo, 18 de diciembre de 2011

Primera reseña de La Fe - Las 12 - Viernes 9 de Diciembre 2011

La fisura por la que caí
Por Paula Jiménez para Las 12, Página 12,
Viernes 9 de Diciembre 2011



“Para comprender mi cuento es necesario desordenar el pensamiento, buscar nuevas coordenadas para unir las palabras. Destruir el argumento. Ir hacia el foco, que irradia y absorbe. Mi cuento surge de la intuición como un hijo o una hoja de un árbol. O el bicho canasta que camina por la rama”, dice Docampo casi al terminar el libro. Pero a esa altura ya lo sabemos, hemos leído casi todos los cuentos y hemos entendido que La fe nos propone una novedosa construcción narrativa, una apuesta formal que experimenta con las derivas del lenguaje y hasta inventa, por momentos, una suerte de escritura del futuro. Aunque en verdad, ningún tema de los aquí desarrollados es futurista, más bien, diría, la autora encarna hasta el tuétano el espíritu de la época que nos toca vivir, extremándolo. De la New Age a las identidades queer o a la posmodernidad, en La fe desfilan y se profundizan los tópicos más paradigmáticos de la era actual, esas realidades que no es que ocurrirán, sino que ocurren. Lo que genera la ilusión de futuro es, precisamente, la mirada potenciadora con que Docampo enfoca estos centros temáticos de nuestra cultura, una cultura construida sobre sistemas: de gobierno, tecnológicos, de organización familiar, de riego, etc. Y el mayor, el más abarcador de todos estos sistemas, el lenguaje, es el que les da marco a los demás, es el que ordena (o desordena) la percepción humana: “La realidad que vivimos es una de las muchas que se dan paralelamente. Yo trazo en mi vida una línea delgada y mentirosa en mi existencia múltiple. Lo que me rodea: la mesa, la computadora, es materia. Lo que conecta una y otra y a mí en este engranaje es la palabra, el discurso, ya puesto a funcionar”. Ya puesto a funcionar, sí, es esa autonomía del lenguaje, de la cultura o del suceder natural lo que por momentos aterroriza en este libro. Esto “puesto a funcionar” puede ser la naturaleza que con su fuerza implacable es capaz de llenar un jardín de insectos, de inundarlo, de matar, o también puedo serlo una acción mecánica, una maquinaria cultural que crece y crece tragándose toda particularidad individual, como en La fe, el cuento que da título al libro, o en El arte y la cultura, donde el mapa de vastísimos conocimientos va disolviendo al sujeto humano que lo expone. En el magistral relato La raíz, primero es el lenguaje el que señala la existencia de la locura: “La hermana del medio estaba loca”, dice en la oración inicial, pero después es la palabra la que va tomando las características del delirio y a partir de un determinado momento sorprende darse cuenta de que no es el argumento el que se desquicia, sino el lenguaje mismo. El lenguaje, pareciera decir la autora de este libro, es la sustancia de cualquier historia y el modo en que se opera con él es el modo en que esa historia sucede. En “El amor”, uno de los más bellos relatos de La fe, el argumento se expresa a través de una suerte de discurso erotizado que se acerca a la escena parcialmente, tocándola y retirándose, y trata a la puntuación y a la gramática con especial delicadeza. Con frases cortas e intensas, Docampo dice cosas así: “El abrazo. Y a partir de entonces los tres días de amor. Cuatro días más. Tal vez otro día. Lo que pasó antes y lo que pasó después fue la preparación. El amor, la fisura por la que caí”. De este tipo de afirmaciones está hecho también este libro en el que su autora redobla la apuesta formal de solidez y originalidad que comenzó con El molino, la novela anterior. La fe suscita en el lector una variedad de emociones que van desde la identificación con lo amoroso y pasional hasta el terror o el humor; la cuestión humana está puesta en primer plano, aunque todo el tiempo aparezca cercada por los límites culturales. Las aristas que el lenguaje busca ponerle a la percepción para condicionarla demuestran que éste es un sistema que falla y que, por el contrario, hay algo divino e inatrapable que no nombrará jamás. Entonces, la fe despierta.

lunes, 17 de octubre de 2011

Presentación de “La Fe"



El miércoles 26 de octubre se presentará mi libro “La Fe” publicado por Editorial Bajo la Luna. Será en la Casa de la Lectura (Lavalleja 924) a las
19.30. Nora Dominguez hablará sobre el libro y luego haremos una lectura performática de los textos con intervención sonora de Bárbara Belloc.

jueves, 29 de septiembre de 2011

Presentamos "Las Antiguas" en la ciudad de Córdoba



Fue el 20 de septiembre en el Museo San Alberto. Estuvimos con Carolina Esses, Vanesa Guerra, Daniela Mac Auliffe y Mercedes Araujo. El 9 de noviembre la presentamos en Buenos Aires.

lunes, 5 de septiembre de 2011

Colección "Las Antiguas". Primeras escritoras argentinas



El martes 20 de septiembre presentamos en la Feria del Libro de Córdoba la Colección "Las Antiguas" de la Editorial Buena Vista, dedicada al rescate de escritoras argentinas del Siglo XIX. Los prólogos están a cargo de autoras contemporámneas. Salimos con "Cocina Ecléctica" y "Tierra Natal" de Juana Manuela Gorriti, "El lujo" de Lola Larrosa y "Los misterios del plata" de Juana Manso. Las prologuistas: Vanesa Guerra, Carolina Esses y Mercedes Araujo. En noviembre hacemos la presentación en Buenos Aires y sumamos más autoras: Emma de la Barra, Eduarda Mansilla, Rosa Guerra, Elvira Aldao de Díaz. Prologuistas: Cristina Piña, María Rosa Lojo, María Teresa Andrueto, Paula Jiménez.

martes, 16 de agosto de 2011

Cartas a André Gide de Marcel Proust. Por Vanesa Guerra





(Publicado en Tiempo Argentino, 24 de Julio del 2011)




"No hice más que hablarle de mí, y sin embargo no pienso más que en usted”. Cuando leí este libro, me enamoré de un amor que no era el mío. ¿Dónde nacen las pasiones? ¿Qué las empuja? Tomada por la letra de Proust, supe de un escritor que arrojó su obra al fondo de una ciénaga y también de otro que encadenó las manos a 100 cuadernos azules; aun reviví el dolor de mi padre, en esa quema de exilio de tantos libros amados. Infinitos son los rechazos del mundo, por ejemplo aquel de 1912 cuando Proust enviara a la N.R.F. el original de Por el camino de Swann y el frágil de Gide, tropezado en el prejuicio, denegara toda posibilidad. Obra muerta. Imposible, más tarde: Obra viva. En ese cruce nacido de avatares y mordazas se anudan estos hombres en puño y letra, se gozan en una pasión que como todas debió abrevar en desmentidas y silencios; pero sabemos que nunca se puede acallar lo que habla; de allí la fuerza, de allí estas cartas, de allí un recuerdo indeleble.

viernes, 17 de junio de 2011

VOCES PARA LILITH

Sobre la antología VOCES PARA LILITH. Literatura contemporánea de temática lésbica en Sudamérica.


Por Mariana Docampo

El jueves 12 de mayo se presentó en el elegante barrio de Miraflores de la ciudad de Lima, “Voces para Lilith”, la primera antología de temática lésbica en Sudamérica. El libro, de muy buena factura y cuidadoso diseño, fue editado por Estruendomudo, una de las editoriales independientes más prestigiosas de Perú, la edición estuvo a cargo de Melissa Ghezzi y Claudia Salazar, las antologadoras, y contó con los auspicios de la Embajada de España en Perú y el Centro Cultural AECID, entre otras instituciones. La mesa de presentación fue larga y bien interesante. Expusieron la Doctora Yolanda Westphalen quien, cabe decir, lleva adelante y con continuidad seminarios de literatura escrita por mujeres en la Universidad Mayor de San Marcos (algo que hasta el momento, y que yo sepa, no existe en las universidades de nuestro país), la reconocida poeta peruana Violeta Barrientos, la narradora y periodista María Luisa del Río, también de Perú, las dos antologadoras, que explicaron con entusiasmo y emoción la importancia de que un libro de estas características salga a la luz por primera vez en Sudamérica, y la escritora Vanesa Guerra y quien escribe, de Argentina, que participamos con textos. El público fue heterogéneo y cordial, sorprendió el alto porcentaje de varones, su escucha respetuosa e interesada.
Pero apenas nos sentamos, y antes incluso de comenzar a beber nuestros Piscos Souer, un joven muy amable y con cámara en mano se acercó a nosotras e hizo varias preguntas que aunque bien intencionadas, pesaron como una acusación: “¿Y por qué una antología lésbica? ¿No les parece una reducción? ¿La literatura no es literatura y punto?” Así que respiramos hondo, bebimos un sorbito y nos miramos, conscientes de que la pregunta era inevitable, y que expresaba, además, la inquietud de muchos. Pero pienso, porque estamos recién llegadas y nos hubiera gustado festejar un rato más la salida del libro: ¿Ya de entrada hay que justificarse? Si está claro, desde el subtítulo, que no se trata de un libro de “literatura lesbiana” (que por otra parte no entiendo bien qué sería), sino de una antología que reúne textos de temática lésbica. ¿Acaso no existen antologías sobre fútbol, o sobre gatos? ¿Alguien preguntaría a sus compiladores si existe la literatura futbolística o gatuna o sólo la literatura “en sí”? Entonces, la respuesta más verdadera y espontánea hubiera sido: “porque se nos da la gana”. Pero como Claudia y Melissa son dadas a la reflexión, y porque saben, además, de las implicancias políticas de este libro, aceptan dar explicaciones. Yo escucho y coincido en casi todo. Y como no se trata de un libro sobre ardillas en el Polo Norte, sino de textos que dan cuenta de formas en que muchas de las personas que habitan este mundo se relacionan entre sí, con todas sus diferencias y complejidades, pienso que además de tener un interés temático, esta antología abre una ventana bien amplia y con luz de sol sobre algo que pareciera no haber existido nunca.
Me da la sensación de que hemos llegado a un momento de libertad de expresión sin precedentes en nuestra cultura y tal vez este libro sirva para ampliar lo dicho y decible en Sudamérica. “A Chloe le gustaba Olivia, quizás por primera vez en la literatura”, dijo Virgina Woolf en 1928 ante un público de damas inglesas, adelantándosenos más de ochenta años, sin miedo a ser leída de ahí en más como lesbiana, consciente de que su obra es tan amplia que toca puntos cruciales de lo humano, pero coherente también, con su necesidad personal de reivindicar derechos y reflexionar sobre temáticas silenciadas, con las que ocupó tantas de sus páginas.
Claudia Salazar se ve obligada a resaltar en el prólogo del libro que éste “no es un catálogo de autoras lesbianas”, y aclara en su exposición ante el auditorio de Miraflores que muchas de las autoras, de hecho, no lo son. Esta aclaración sirve, quizás, para cuidar a las escritoras del peligro de ser “acusadas” de lesbianas por el mero hecho de haber participado en esta antología, y también funciona como respuesta a quienes por miedo o prejuicio se han negado a participar. Debemos admitir que es muy probable que muchos encasillen a las autoras, y reduzcan los textos a una mera etiqueta, porque la reducción de lo diferente es a veces la única manera en que una sociedad puede asimilarlo, y seguir afirmando la pretendida homogeneidad del mundo. Pero eso ya es tema de los lectores y de los complejos mecanismos de inclusión y exclusión, y no de las autoras, y mucho menos, de los textos, que, vale aclarar, hablan por sí mismos.
Como en la mayoría de las antologías de literatura contemporánea, en “Las voces de Lilith” hay textos de calidades dispares, aciertos y desaciertos, pero algunos de los textos buenos lo son tanto que bien valen todo el libro. Por nombrar sólo unos pocos: los tres poemas de Malú Urriola, el bello “Esteros del Iberá” de Paula Jimenez, el cuento ágil e inteligente de la joven escritora peruana Jennifer Thorndike, los textos de Vanesa Guerra, Cristina Peri Rossi, Reina Roffé, Violeta Barrientos, Tilsa Otta, dan cuenta de que sí, existe la literatura “en sí” y dentro de ella, muchas veces, están representadas las lesbianas.
La literatura, desde siempre, y en mi historia individual, ha permitido reflexionar sobre la realidad, y profundizar en las propias emociones y subjetividad, traducir a un lenguaje común las impresiones de este mundo. Personalmente, confío en la contundencia de los libros, y en la necesidad de la libertad psíquica y política para poder decir y pensar. Creo en la irrupción de la palabra que nombra y al hacerlo incorpora lo dicho a lo existente. En el caso de este libro, lo incorporado son nada menos que representaciones de identidades que históricamente han sido silenciadas. Los textos permitirán que en ellos se reconozcan muchas personas que hayan atravesado experiencias semejantes, y a quienes no, mostrarán mundos distintos, que no pueden, vistos a través del prisma literario, sino ampliar la propia experiencia y alterarla positivamente. Los prejuicios, y esto acabo de comprenderlo de manera cabal tras mi regreso de Perú, nos hacen ignorantes. Al reducir al otro perdemos la visión de su plenitud, y las posibilidades que con ella tenemos de transformar y expandir nuestro universo personal.

jueves, 19 de mayo de 2011

BALTHUS Y EL COLOR

Françoise Jaunin: ¿Cuál es tu relación con el color?
Blathus: Un color no existe más que en relación con los otros colores. Es como una nota musical que depende necesariamente de todas las que la rodean. Solamente cuando está terminado -¿y puede serlo del todo?- podemos saber cuál es el color real del cuadro. En términos musicales, la pintura es un largo proceso que consiste en hacer de manera tal que las notas produzcan juntas el sonido justo. Dicho de manera, digamos, más orgánica, los colores cambian según lo que yo llamo su “carne”. Cada color desprende una materialidad y una luz que le son propias. Un color exacto crea una suerte de absoluto. Cuando era niño conocí a Piero Della Francesca a partir de reproducciones en blanco y negro. Descubrir sus frescos en el lugar mismo, con todo el resplandor claro y opaco de sus colores reales, fue una verdadera revelación: de golpe cobraban vida.

De Meditaciones de un caminante solitario de la pintura. Entrevistas a Balthus por Françoise Jaunin

domingo, 1 de mayo de 2011

“Cuatro novelas raras” - Taller de lectura y discusión de textos














"Cuatro novelas raras” - Taller de lectura y discusión de textos. Coordinado por Mariana Docampo

Comienza: Lunes 2 de mayo 2011

En este taller abordaremos la lectura de cuatro novelas cortas de escritoras latinoamericanas, que podrían considerarse “raras” dado su prosa personalísima y su manera de abordar lo que se dice. Leeremos “La promesa”, texto póstumo de la escritora argentina Silvina Ocampo, “La mujer desnuda”, primera novela de la narradora uruguaya Armonía Somers, Eisejuaz, novela de culto escrita por Sara Gallardo y “Un soplo de vida” de la brasilera Clarice Lispector.
La dinámica del taller consiste en la puesta en común y discusión de las lecturas individuales, privilegiando el placer del encuentro personal con los textos y la oportunidad de compartir interpretaciones. La coordinadora propondrá líneas de lectura y repondrá información sobre las autoras.


Programa: Se dedicarán dos reuniones a la lectura de cada obra.

1. “La promesa”, Silvina Ocampo
2. “Eisejuaz”, Sara Gallardo
3. “La mujer desnuda”, Armonía Somers,
4. “Un soplo de vida”, Clarice Lispector


Días y horarios: Lunes de 19 a 21 hs.
Lugar: Librería Fedro (Carlos Calvo 578)
Fecha de inicio del taller: Lunes 2 de mayo 2011
Duración: 2 meses (total 9 reuniones)
Arancel: $ 170 mensuales
Informes: mariandoc73@hotmail.com / 1532526894 / www.tallerdescritoras.blogspot.com/

Aclaración: No es requisito tener conocimientos específicos ni lecturas previas. El taller está destinado a todas las personas que tengan ganas de leer y compartir lecturas e interpretaciones.

jueves, 28 de abril de 2011

HUMANARIO




"Me parece más necesario que nunca remarcar esos grados extremos en que la inteligencia y la cordura se encierran en su propia saturación y se vuelven mucho más peligrosos que la locura del Hospico"




de "Estrictamente no profesional", prólogo de Julio Cortázar al libro Humanario (Sara Facio y Alicia D'Amico)

martes, 26 de abril de 2011

Jueves 28 de abril - Lectura en Boedo

Jueves 28 de abril 20.30 hs Ciclo de poesía. Coordina Gabriela Franco.


Leen: Mercedes Araujo, Javier Cófreces, Rosa Lesca, Eduardo Mileo y Marisa Negri.

Mercedes Araujo nació en Mendoza en 1972. Es escritora y abogada. En 1993 obtuvo el segundo premio del Certamen de Poesía Joven, otorgado por la Dirección de Cultura de Mendoza, con la obra Bocetos barrocos. En el año 2000 fue seleccionada en la antología de diez poetas jóvenes, Poetas de la Feria, organizada por la Fundación El Libro. En 2006 obtuvo la primera mención de honor del Fondo Nacional de las Artes por la novela Tiempo salvaje. En 2010 obtuvo el tercer premio del Fondo Nacional de las Artes en poesía con el libro La isla. Publicó también los libros Ásperos esmeros, Duelo, Viajar sola y La isla. Sus poemas forman parte de las antologías Hotel Quequén I, Hotel Quequén IV y Poetas argentinas. 1960-1980. Participó en la fundación de los proyectos editoriales Sigamos enamoradas y Abeja reina.




Javier Cófreces nació en Buenos Aires en 1957. Fundó el grupo Onofrio de Poesía Descarnada en 1977. En 1981 fundó la revista de poesía La Danza del Ratón, que dirigió durante veinte años hasta su último número. Preparó numerosas antologías, entre ellas Siete surrealistas argentinos, Poesía Buenos Aires x 10, Los V latinos, Primera poesía argentina y Perras. Publicó los libros de poesía Grupo Onofrio de Poesía Descarnada; Años de goma; La liebre tiesa; Pasaje Renacimiento; Amianto; Mar de fondo, Ropa íntima; El ojo de agua y Tránsito. Junto con Alberto Muñoz, escribieron los libros Venecia negra; Canción de amor vegetal y Tigre. Fue traducido a varios idiomas y participó en antologías argentinas y extranjeras.




Rosa Lesca nació en El Hojo de Epuyén, Chubut, en 1982. Cursa la carrera de Letras en la Universidad de Buenos Aires. Publicó la plaqueta Día del padre (AroAro, 2005) e integró las antologías Última poesía argentina (Ediciones en Danza, 2008) y el segundo volumen de Poesía manuscrita (2009). Participó de talleres de poesía y narrativa con Claudia Prado y Paula Jiménez.



Eduardo Mileo nació en Buenos Aires el 4 de julio de 1953. Editó los libros Quítame estas cruces (1982), Tiendas de campaña (1985), Dos épicas (junto a Alberto Muñoz, 1987), Puerto depuesto (1987), Mujeres (1990; 2ª edición, 2005), Misa negra (junto a Alberto Muñoz, 1992), Poema del amor triste (2001), Poemas sin libro (Primer Premio de Poesía del Fondo Nacional de las Artes, 2002), Muro con lagartos (2004) y Poemas del sin trabajo (2007) –los cuatro últimos, y la 2ª edición de Mujeres, en Ediciones en Danza, sello que codirige junto a Javier Cófreces y Alberto Muñoz–. Junto al compositor Raúl Mileo, ha editado los CD de canciones A boca de jarro e Irala, sueño de amor y de conquista. Con Javier Cófreces, editó Un palmar sin orillas (Ediciones en Danza, 2009), antología de poemas de Francisco Madariaga. Con Gabriela Franco y Javier Cófreces, editó las antologías Última poesía argentina (Ediciones en Danza, 2008) y Primeras poetas argentinas (Ediciones en Danza, 2009).




Marisa Negri nació en Buenos Aires en 1971. Es profesora de Castellano, Literatura y Latín y se especializó en Educación por el Arte. Ha coordinado talleres de escritura para diversas instituciones de todo el país. Publicó los libros de poemas Caballos de arena y Estuario, y preparó la antología El jardín posible con la obra poética de Olga Orozco. En 2010 realizó el Primer Festival de Poesía en la Escuela, que promovió la lectura y escritura de poesía en las escuelas y el acercamiento directo de los chicos con los escritores.

viernes, 22 de abril de 2011

Nota publicada hoy en SOY, Página 12


Los Diminutivos. Por Mariana Docampo


En mi clase de yoga trabé amistad con una señora de espíritu bondadoso que trabaja como profesora de Matemáticas en un bachillerato para adultos, turno noche. Al colegio donde da clases acuden muchos alumnos bolivianos, peruanos y chinos, a quienes ella llama invariablemente “bolivianitos”, “peruanitos” y “chinitos”, pudiendo estos últimos ser chinos o coreanos de manera indistinta, y superando casi todos ellos los treinta años de edad. A sus alumnos argentinos los llama “argentinos”, y siempre aclara que son los peores de la clase. Los “bolivianitos pobrecitos” son, según Mabel, “buena gente, muy trabajadora”; “los peruanitos son todos mafiosos”, pero ella los quiere igual; y “a los chinitos no se les entiende nada, pero son muy inteligentes”. Un día me dijo que en su clase tenía dos “travestitos” de la Villa 31. Yo la miré con sorpresa y le pregunté qué era un “travestito”. Mabel dijo, buscando sus mejores palabras, para ser respetuosa: “Son hombres que vienen vestidos de mujer”. Como se trata de un colegio católico, le pregunté si las autoridades de la institución no hacían problemas, y me contestó que no, que “estaba todo bien”. Sin embargo, cuando hace un tiempo el Episcopado argentino “solicitó” a los directivos, maestros y profesores de escuelas católicas que asistieran a la marcha contra el matrimonio igualitario que tuvo lugar el 13 de julio de 2010, a Mabel la llamó por teléfono el director del colegio pidiéndole que por favor fuera. Ella le contestó que no iría, por dos razones: en la misa del domingo había escuchado a un cura rebelde con su cúpula contar la historia de un gay que había cuidado de su pareja hasta la muerte, y el relato la había conmovido y hecho reflexionar; y en segundo lugar, por los “travestitos” de su clase. Y entonces exclamó: “¡Con qué cara voy a ir a la marcha contra el matrimonio gay y alentar a mis alumnos a que vayan también si es una marcha que está contra dos de ellos!”. Algún tiempo después de esta conversación, y ya habiendo sido firmada la ley de matrimonio igualitario, Mabel sigue llamando “travestitos” a sus alumnas travestis y “bolivianitos” a sus alumnos y alumnas de Bolivia, aunque todos ellos hayan alcanzado la edad adulta. Pienso que con el diminutivo busca acaso protegerse de una diferencia que la asusta, y al mismo tiempo proteger de prejuicios propios y ajenos a sus alumnos más vulnerables.
Dejando para otra discusión el tema de lxs inmigrantes, una ley como la sancionada sumada a la ley de identidad de género, que falta, pueden hacer que los “travestitos” de Mabel se vean a sí mismos ya no como pequeñas personas problematizadas sino como adultos con plenos derechos, y de esta manera comiencen a presentarse en ámbitos sociales. Si bien esto asustará a muchos y enojará a otros, será sin dudas una manera de acompañar el cambio legal con un reposicionamiento de cada unx de nosotrxs, que supone pensarnos en la plenitud de quienes somos, sin complejos ni minimizaciones que disminuyan nuestras capacidades como seres humanos y cívicos.




viernes, 1 de abril de 2011

Quinta Dimensión, Wikipedia

En física, una secuencia de N números puede ser entendida para representar un lugar en un espacio de N dimensiones. Cuando N = 5, puede ser llamado la quinta dimensión. Este uso puede ocurrir en discusiones sobre la cuarta dimensión. El espacio abstracto de cinco dimensiones ocurre frecuentemente en las matemáticas, es perfectamente construible. Si el universo real es o no de 5 dimensiones, esto puede ser explorado en muchas ramas de la física como en la astrofísica y física de partículas.

Quinta dimensión en física

En física, la quinta dimensión es una hipotética dimensión extra, más allá de las 3 dimensiones espaciales y una de tiempo. Algunos científicos han especulado que el gravitón, una partícula que está asociada a los efectos de la fuerza de gravedad, puede salir a una quinta o más dimensiones y el cual explicaría por qué la fuerza de gravedad es significativamente más débil que las otras fuerzas fundamentales.
La teoría Kaluza-Klein usa la quinta dimensión para unificar la gravedad con la fuerza electromagnética. La idea consiste en que una partícula en un campo electromagnético y que por tanto que aparentemente no sigue la línea más recta posible vista desde las tres dimensiones espaciales puede ser tratada matemáticamente como una partícula siguiendo la línea más recta posible, línea llamada geodésica de un espacio-tiempo con una dimensión extra. Puesto que el espacio-tiempo de la teoría de la relatividad es una variedad pseudoriemanniana (M, g) de dimensión 4, el espacio-tiempo ampliado de Kaluza-Klein sería una variedad de dimensión 5. La "invisibilidad" aparente de la nueva dimensión se explica en uno de los modelos de Kaluza-Klein en que el espacio-tiempo ampliado tiene la estructura topológica M x S, y de hecho cada punto del espacio-tiempo convencional es de hecho un pequeño círculo de dimensiones inferiores a las atómicas. Esta teoría se considera modernamente como una teoría de unificación, con grupo unificador del círculo SU(1)[ = S1]. La teoría-M amplía esta idea y sugiere que el espacio-tiempo tiene 11 dimensiones, 7 de los cuales están debajo del nivel subatómico.

En 1993 el físico Gerardt Hooft publicó el principio holográfico, el cual explica que la información de una dimensión extra es visible como una curvatura del espacio tiempo con una menos dimensiones. Por ejemplo, los hologramas son imágenes de 3 dimensiones colocadas en una superficie de 2 dimensiones, el cual da a la imagen una curvatura cuando el observador se mueve. Similarmente, en relatividad general, la cuarta dimensión esta manifestada en 3 dimensiones observables como la curvatura de un sendero de un movimiento de partícula (criterio) infinitesimal. Hooft ha especulado que la quinta dimensión es realmente la fábrica del espacio-tiempo.

Quinta dimensión en matemáticas

Hiperpoliedros o politopos Demostración de 1 a 5 dimensiones.

En cinco o más dimensiones, solo existen tres hiperpoliedros o politopos regulares. Para N dimensiones, estos son:

El n+1-simplex, que posee N+1 vértices, todos en distancias iguales uno del otro y construido usando N+1 símplex de dimensión N-1. Por ejemplo, el símplex de 3 dimensiones es el tetraedro y el símplex de cinco dimensiones es el hexátetron, que tiene 6 vértices, 15 aristas, 20 caras (cada una un triángulo), 15 celdas (o sólidos, cada uno un tetraedro) y 6 hiperceldas (cada una un pentácoron)

El politopo medido o hipercubo, tiene 2N vértices los cuales pueden ser escritos (±1,±1,..., ±1) para algunos ajustes compatibles de ejes. Consiste 2N polígonos medidos de la siguiente dimensione menor. Las cinco dimensiones medidas de un polígono es decayeron o pentaracto, tiene 32 vertices, 80 aristas, 80 caras (cada una cuadrado)1 40 celdas (como un cubo), y 10 hiperceldas (cada una teseracto).

El politopo de cruz, con 2N vértices, en pares en lados de N ejes coordinados, consiste de 2N simples de N-1. El polígono de cruz de cinco dimensiones es un triacontakaiditeron o pentacruz, con 10 vertices, 40 aristas, 80 caras (cada una triangulo), 80 celdas (cada una tetrahedron), y 32 hiperceldas (cada una pentacoron).

El polígono dual de un simplex es un simplex. Un polígono medido y un polígono de cruz de la misma dimensión es dual uno al otro. Estas son imágenes proyectadas de las aristas de un decateron regular o pentaracto.


miércoles, 16 de marzo de 2011

Lola Larrosa: El Lujo


Leyendo escritoras argentinas del siglo XIX para la colección de Buena Vista, me sigo sorprendiendo de lo quemada que tenían la cabeza estas señoras. De ellas venimos.

Lola Larrosa es una de mis preferidas, por su prosa apasionada y sus simpáticas descripciones; su modo simple de describir escenarios y personajes. El texto es lindo, si no juzgamos a Lola, y hacemos a un lado a la “santa madre” que baja línea en todas partes. El libro entero pareciera estar resumido en los versos de Azucena: “No salgas de tu barrio, se buena muchachita...”.

Un crítico cualquiera, que sólo trascendió por su violencia de género, mandó a callar a Lola, le dijo poco menos que : “esta señorita insiste en escribir, debería irse a lavar los platos...” Y eso que ella escribía lo que había que escribir. Pero evidentemente su sola insistencia en la tierra varona de la escritura tenía mucho de revolucionario.

Un adelanto de Lola Larrosa, desesperada y desesperante, porque aquí no ironiza:

“¡Ah! ¡Cuán necesaria es la forzosa educación moral de la mujer, para que se mantenga siempre en la esfera de su elevada misión en la tierra, y para que jamás deje de ser noble y adorablemente simpática y amada por todos!
Hay mujeres que saben mucho, muchísimo, que poseen profundos conocimientos en materias diversas, y que hacen asombrosa gala de su vasta erudición y de su capacidad para el estudio instructivo y analítico, y que luego deleitan por la claridad de sus raciocinios, por lo brillante de sus concepciones, por su dialéctica, y la altura, la ilustración y la elocuencia con que tratan las más complejas cuestiones, ora sociales, ora filosóficas.
Más ¡ay! Más les valiera ser ignorantes; porque cultivaron tan solo su inteligencia, sin curarse del corazón, cuyo único saludable alimento es la moral cristiana, base inconmovible del arte verdadero de la vida y de la humana felicidad!¡Bendita seas educación moral, la que hemos recibido de los labios de nuestra santa madre!
¡Cuán bella y consoladora eres!"

martes, 8 de marzo de 2011

Giacomo Leopardi: El Infinito



Uno de mis poemas predilectos por sobre todo lo que conozco de lo escrito:

L’Infinito

Sempre caro mi fu quest'ermo colle,
E questa siepe, che da tanta parte
De ll'ultimo orizzonte il guardo esclude.
Ma sedendo e mirando, interminati
Spazi di là da quella, e sovrumani
Silenzi, e profondissima quiete
Io nel pensier mi fingo, ove per poco
Il cor non si spaura. E come il vento
Odo stormir tra queste piante, io quello
Infinito silenzio a questa voce
Vo comparando: e mi sovvien l'eterno,
E le morte stagioni, e la presente
E viva, e il suon di lei. Così tra questa
Immensità s'annega il pensier mio:
E il naufragar m'è dolce in questo mare.

viernes, 25 de febrero de 2011

Sábado 26 de febrero en El Museo de la Novela Eterna (AM 750)


Mañana entre las 9 y las 10 de la mañana en contacto con el programa Museo de la Novela Eterna (AM 750) para hablar sobre COCINA ECLECTICA de Juana Manuela Gorriti y la colección de escritoras del Siglo XIX de Editorial Buena Vista. Se puede escuchar por la web http://www.radioam750.com.ar/

jueves, 17 de febrero de 2011

Lecturas en la Playa - Quequén 2011


Sábado, 19 hs. En la playa de Quequén, frente al Balneario Monte Pasubio
Presentación del libro -parte 1-
Lecturas: Susana Cella, Diego Bentivegna, Elba Serafini, Juan Bautista García Bazán, Diego Di Vincenzo...
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Domingo, 10:30 hs. (En el mismo lugar)
Lecturas: Paula Jiménez, Daniel Del Percio, Mariana Docampo, Vanesa Guerra...
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Domingo, 19:00 hs. (En el mismo lugar)
Presentación del libro -parte 2-Lecturas: Daniel Freidemberg, Cristina Piña, Carlos Bernatek, Enrique Butti, Mercedes Araujo...
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Encuentros y charlas clandestinas: en "La chiruza"

miércoles, 16 de febrero de 2011

Comienza hoy en Casa de Letras: Taller sobre Silvina Ocampo


Fantasías, sueños, máscaras y metamorfosis en Silvina Ocampo. Coordinado por Mariana Docampo

Recorrido por algunos de los cuentos de la escritora argentina Silvina Ocampo. Las reuniones girarán alrededor de cuatro ejes de lectura, que han sido temas privilegiados en las invenciones de la autora: lo fantástico, los sueños, las máscaras y las metamorfosis.
La dinámica del taller consistirá en la puesta en común y discusión de las lecturas, priorizando el placer del encuentro personal con los textos y la oportunidad de compartir interpretaciones.
Los miércoles de 18 a 20
Duración del taller: 4 reuniones
en Casa de Letras
Perú 375, 8º piso
Informes e inscripciones: 5352-3355

lunes, 7 de febrero de 2011

John Berger

Por suerte, cada tanto, alguien escribe.

"La luz que hace posible la vida y lo visible. Tal vez aquí toquemos la metafísica de la luz (Viajar a la velocidad de la luz significa dejar atrás la dimensión temporal). Al caer, no importa sobre qué, la luz otorga una cualidad de “primeridad” que lo vuelve prístino aunque en realidad puede ser una montaña o un mar de equis millones de años. La luz existe como un continuo comienzo interminable. La oscuridad, en cambio, no es, como suele suponerse, una finalidad sino un preludio. Es lo que me dice mi ojo izquierdo que apenas puede distinguir los contornos todavía". John Berger